Pongamos la salud mental en el centro de nuestra universidad

Según el Barómetro Sanitario de 2025, uno de cada cinco españoles ha necesitado atención por problemas de salud mental en el último año. Este porcentaje muestra cuán necesario es su cuidado en cualquier tipo de entorno, especialmente en aquellos donde pasamos más tiempo. También en aquellos que inciden en nuestra definición personal, como son los espacios educativos y laborales. La universidad, lugar que cumple esta doble condición, debe de estar plenamente dotada y socialmente sensibilizada para que la salud mental sea atendida como se merece. 

En el plano de los recursos, nuestra universidad adolece de un proyecto que afronte la salud mental de forma integral. Reclamamos más personal y mayores medios para fortalecer las unidades que actualmente atienden como pueden al profesorado, estudiantado y personal técnico de gestión y administración y servicios que lo solicitan. Si según las estadísticas, un 20 % de la población española manifiesta dichas necesidades, esto podría suponer, que en nuestra universidad unas trece mil personas requerirían atención en este sentido. Desde luego, ante una cifra así, no parece que sea suficiente con una unidad central, considerando que debería de realizarse un plan integral que se desarrollara por campus y centros. Con profesionales que constituyan una referencia de confianza a quien dirigirse en caso de ser necesario. 

Pero no sólo son necesarios medios y recursos humanos, también hace falta sensibilización y concienciación alrededor de esta realidad, cuyo máxima expresión son los numerosos suicidios que ocurren continuamente en nuestra sociedad, en algunos casos relacionados con acoso en entorno educativos. La universidad es reflejo del mundo en que vivimos y, además, debe de ser vanguardia en igualdad, inclusividad y diversidad. Por este motivo, es fundamental que existan medidas para que incorporemos como comunidad universitaria una mirada más comprensiva e integradora hacia esta situación. En este sentido, reclamamos mayor formación e información desde el Equipo de Gobierno sobre cómo ser parte activa de un entorno saludable en materia de salud mental.

Desde RedUS consideramos que la salud mental es fundamental para el desarrollo de la vida académica, laboral y personal por lo que reclamamos que se sitúe en las líneas prioritarias de la política universitaria. Pongamos la vida en el centro.